Corrida de nota alta de Victoriano del Río, con cuatro toros bravos, encastados y con clase. El mejor de todos el extraordinario quinto, un ejemplar muy completo. Sinfonía al natural de Emilio de Justo con ese toro, al que lo ha cuajado de forma magnífica, rubricando su labor con un sensacional espadazo. Una oreja ha cortado Ginés Marín del tercero, en el que ha brillado también manejando la mano izquierda. Sebastián Castella ha tenido una actuación notable frente al primero, perdiendo premio con los aceros
Ficha
Plaza de toros de Pamplona. Quinto festejo de la Feria de San Fermín. Tercera corrida de toros. Lleno. Cinco toros de Victoriano del Río y uno de Toros de Cortés (6º), el mejor del conjunto el bravo y enclasado quinto. Alcanzando también buena nora 1º, 2º y 3º.
Sebastián Castella: Silencio tras aviso y Silencio tras dos avisos.
Emilio de Justo: Palmas y Dos orejas.
Ginés Marín: Oreja y Silencio.
Faena de entrega y buen toreo de Emilio de Justo al segundo
Emilio de Justo recibe al segundo toro saliéndose hasta los medios, pegándose éste una voltereta. Buenos puyazos de Germán González, empujando más el astado en el segundo puyazo que en el primero, dónde ha echado la cara arriba. Animal con fijeza, prontitud, exigente, bravo al que ha toreado por abajo y con poder Emilio de Justo, mejores las series con la derecha, la última de ellas al natural, sin la ayuda de la espada. Por ahí ha embestido más largo y con más entrega el ejemplar de Victoriano del Río, por el izquierdo se ha metido más por dentro. Gran estocada. Palmas.
Faena redonda al natural de Emilio del quinto, premiada con dos orejas
Variado recibo mezclando verónicas y chicuelinas de Emilio de Justo al quinto. El animal aprieta en varas evidenciando buena condición, suministrándole dos magníficos puyazos Juan Bernal. Magníficos pares de banderillas de El Algabeño. Mucha ligazón entre los muletazos en la faena del diestro cacereño, resultando extraordinarias las series instrumentadas con la mano izquierda, encajado, asentado el torero, haciendo las cosas con verdad, pureza y compromiso. Bravo, encastado y con clase el cornúpeta de la ganadería madrileña. Soberbio el final del trasteo con ayudados por bajo, con mucha torería. Espadazo en lo alto. Dos orejas.
Reunión y ligazón de Sebastián Castella frente al primero, impidiéndole el fallo con la espada sumar algún trofeo
Quite por chicuelinas de Emilio de Justo. Sebastián Castella brinda la faena al chef Mario Sandoval, que asistía a la corrida en una barrera. Toro exigente, encastado, al que el torero francés la puede mucho en las primeras tandas con la derecha, viniéndose el animal un poco a menos. Acorta las distancias el diestro de Beziers, logrando una serie reunida, ligada y por abajo muy rotunda con la derecha en el tramo final del trasteo. Clase ha mostrado el astado de la divisa madrileña. Dos pinchazos y estocada trasera. Silencio tras aviso.
Muy por encima Castella del deslucido cuarto
El cuarto no tiene celo, no se emplea nada en los primeros tercios de la lidia. Sebastián Castella da inicio al trasteo con doblones por bajo, tratando de quedarse con la embestida de su enemigo. Firme el torero de Beziers, seguro y poderoso, toreando con mucho compromiso al animal más deslucido y con menos raza del encierro, que se ha defendido al sentirse sometido, protestando y dando tornillazos a la muleta, e incluso volteando a Castella, sin consecuencias. Falla con el estoque el matador francés. Silencio tras dos avisos.
Labor meritoria, destacando el toreo al natural, de Ginés Marín, premiada con un apéndice
Buen juego de brazos de Ginés Marín en el recibo capotero por verónicas al tercero, que derriba en el primer envite al picador Ignacio Rodríguez. Quite por chicuelinas y tafalleras de Ginés Marín. De rodillas inicia la faena el torero formado taurinamente en Extremadura, pasándose muy cerca la seria arboladura de su antagonista. El astado ha tenido nobleza y clase pero le ha faltado un poco mayor de fuerza. La labor ha cogido vuelo especialmente al natural, conduciendo con poder, temple y sometimiento al de Victoriano del Río, llevándolo hasta atrás de la cadera. Concluye toreando con ajuste por bernadinas. Estocada arriba. Oreja.
Disposición de Ginés Marín frente a la falta de clase del sexto
El sexto, de Toros de Cortés, no ha realizado buena pelea en varas, repuchándose al castigo. Poca clase y raza del astado, que se queda corto, sin humillar, dice muy poco en su embestida. Muy dispuesto Ginés Marín, por encima de su oponente. Gran estocada. Silencio.
Carmen de la Mata
Foto: Prensa Emilio de Justo
