Toreo de gran dimensión de David Galván en su regreso a Sevilla
La espada de Galván no consagró sus dos importantes faenas
Ficha
Real Maestranza de Caballería de Sevilla. Quinta de Abono. Entrada: Media entrada. Toros de Alcurrucén, bien presentados, para David Fandila «El Fandi», David Galván y Ginés Marín. El segundo fue un buen toro y el cuarto, extraordinario, bravo, repetidor y con calidad.
El Fandi: Silencio y Ovación con saludos.
David Galván: Gran ovación tras aviso y Ovación tras aviso.
Ginés Marín: Ovación tras aviso y Silencio.
La quinta de Abono registró un poco de más de media entrada en una tarde donde David Galván regresaba a las Maestranza tras diez años de ausencia.
David Galván
Segundo
Cosió una faena de extraordinaria ligazón y técnica al primero de su lote, dejando claro que es un torero con oficio. Compuesta la figura, ofreciendo el pecho, despertó al respetable y sonaron los primeros acordes de una faena rematada con la pañosa, llena de suavidad, acompañando a la embestida de un noble repetidor. Lo de Galván era ya otra cosa. Delicadeza, como pluma al viento, naturales largos y aquello se calentó. Se vislumbraba triunfo que no llegó. No estuvo certero con una estocada contraria y ligeramente tendida, como tampoco con el descabello. Ovación.
Quinto
Más templada la muleta con el segundo de su lote, otro noble del conjunto, también se mostró obediente al cite. Faena basada en la derecha, el de San Fernando lo acompañaba con su voz, retumbante ante el silencio de un público ansioso por ver la tarde definida. Y tampoco la espada que pareció estar en el sitio resultó cierta -atravesada-, ni con la cruceta, perdiendo las opciones de triunfo de otra cimentada labor con un astado que ofreció muy poco. Muy por encima Galván de su antagonista. Ovación.
El Fandi
Primero
En el primero de la tarde obtuvo relevancia la lidia en el tercio de banderillas, que ya en la muleta, tendió a perder la atención quedándose a mitad del muletazo, no pudiendo ligar con acople. Faena meritoria del torero de Granada. Remató con estocada tendida y descabello. Silencio.
Cuarto
El buen «Profesor», segundo del lote de El Fandi, fue un gran toro, brillante con los rehiletes con movilidad y acometividad. Transmisión por ambos pitones, comenzó de rodillas, dos tandas vibrantes que continuó al encastado cuarto de la tarde. La faena tuvo emoción e intensidad, con un animal haciendo las cosas con bravura y entrega y un torero que firmó un trasteo de sometimiento y poder. Remató con estocada tras pinchar y se oyó una leve petición de oreja del ovacionado toro en su arrastre.
Ginés Marín
Tercero
Ginés Marín estuvo entregado con el tercero de la tarde, de extremada nobleza y pasmosa fijación. El jerezano le respetó los tiempos, pero aquello no calentó, le hizo bien las cosas pero le faltó el brío necesario para chispear. Se tiró al lomo y le dejó media estocada agarrada tras pinchar. Dobló el toro al sonar el aviso. Ovación.
Sexto
El sexto tuvo menos opciones, muletazos sin emoción, el toro acusó falta de fuerzas y se Marín insistió sin el empuje de su oponente. Dejó una buena estocada. Silencio.
Galería fotográfica
Vídeo
Crónica: Rocío Molina Pineda
Fotos: Arjona – Pagés
Vídeo: Toromedia Comunicación